sábado, 6 de noviembre de 2010

La ortografía española dará un giro radical: la "ch" y la "ll" no existirán

En las escuelas se enseña que la “ch” y la “ll” son letras del alfabeto, y se diferencia la “be” alta de la “v” baja, pero tales postulados ahora deberán ser olvidados. El idioma español está a punto da dar un giro radical, según se hizo público ayer en el borrador de la nueva ortografía del español que preparan las 22 Academias de la Lengua a uno y otro lado del Atlántico.
La “ch” y la “ll”, consideradas letras desde el siglo XIX, serán excluidas del alfabeto, aunque se conserva su pronunciación. Y no es el único cambio previsto por los académicos, que deberán dar su visto bueno a las nuevas reglas de una ortografía que comparten cientos de millones de hispanohablantes en su reunión del domingo 28 venidero en Guadalajara, México.
“Se trata de evitar la dispersión”, dijo el académico español Salvador Gutiérrez, coordinador de los trabajos para la nueva ortografía. “Ha sido un estudio exhaustivo, muy razonado. Como consecuencia de tratar de hacer una ortografía coherente hay que hacer algunos cambios, y para que sea panhispánica también tiene que haber cambios”.
La denominación “be alta o larga” para referirse a la “b” o “ve baja” para la “v” se sustituirá obligatoriamente por la nomenclatura “be” para la “b” y “uve” para la “v”, algo común en España, pero no en América latina.
La “w” se denominará “doble uve” y la “y” ya no será llamada “i griega”, sino “ye”.
“Les va a costar (en América latina) aceptar la uve y a nosotros (los españoles) lo de y”, añadió Gutiérrez. “Lo que tenemos que buscar es una denominación única, si no habrá una gran dispersión en el idioma”.
El borrador prevé suprimir las tildes en monosílabos con diptongo, como “truhán” o “guión”. También se elimina la tilde en la conjunción disyuntiva “o” cuando separa números. Así que para escribir “4 ó 5” no hará falta acentuar la vocal.
Las academias también recomiendan suprimir la tilde en “sólo”, tal y como debía figurar en algunos casos. Además, se propone la eliminación de la “q” cuando representa el fonema “k”. De esta forma, Iraq se escribiría “Irak” y quórum sería “cuórum”.
“Exmarido”. Además, los prefijos “ex” o “anti” se unirán a la palabra que preceden. De esta forma, será “exmarido” y no “ex marido”, como hasta ahora. Se respetará la separación cuando estos prefijos antecedan a dos o varias palabras, como en el caso de “anti pena de muerte” o “pro derechos humanos”.
El objetivo es que las nuevas reglas ortográficas, consensuadas por todas las academias, se publiquen antes de finales de año. Este volumen completaría la Gramática del español, que vio la luz a finales de 2009, y que también se elaboró con el trabajo de las 22 academias de todo el mundo.
“Los puntos calientes están aprobados”, manifestó Gutiérrez. “No ha sido tan complicado ponernos de acuerdo. Hemos culminado un proceso de discusión en el que ya llevábamos mucho tiempo”.
Otra de las modificaciones importantes que realiza la Academia está relacionada con el uso de extranjerismos. En este caso, “si no han sido adaptados a la ortografía española, continuarán apareciendo sin tilde y deberán escribirse en cursiva”, señaló Gutiérrez. Latinismos que aparecían escritos en letra redonda y con acentuación gráfica deberán mantener, pues, su forma original, como es el caso de “ex cathedra”, “casus belli” o “deux ex machina”.
En anteriores ediciones se consideraba a los prefijos “ex”, “anti” o “pro” como preposiciones, por lo que se escribían separados de la palabra a la que acompañaban. Ahora, sin embargo, la RAE los analiza como prefijos y, como tales, deberán escribirse unidos a la base léxica, aunque sólo si afectan a una sola palabra (exmarido, antisocial, ex capitán general o pro derechos humanos”).

2 comentarios:

  1. entonces al pollo le llamaremos polo ???

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  2. Esperemos que la Real Academia revea ciertas cosas que están arraigadas en nuestro lenguaje desde hace mucho tiempo y que son fundamentales para una óptima comunicación y que sea flexible en otras como por ejemplo las nuevas palabras que se van anexando a nuestra cotidianeidad. Gracias por tu comentario, Anónimo.

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